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Clientes… ahhhh, esos maravillosos… ¡clientes!

Clientes volando

Hola, espero que este escrito te encuentre bien, donde quiera que estés. Sé bien que este post y el anterior no son válidos únicamente para el mundo del desarrollo de los videojuegos, pero dada la respuesta recibida en el anterior y los emails que me han enviado tengo que hacer la segunda parte del anterior post “Ganar dinero, programando videojuegos siendo freelancer“. Y es que en la lista de tips que dí para conseguir trabajo, o en las preguntas que hice, la mayoría de ustedes vieron problemas básicos: los clientes. ¿Cómo tratar con clientes?

Trabajar como freelancer se puede hacer, si, hasta vestido con traje y corbata, en plena calle con una sonrisa… (las respuestas recibidas al anterior post en muchos grupos fueron geniales por la imagen destacada que coloqué… a ver qué dicen de esta), pero básicamente tu vida va a depender de esos seres conocidos como los clientes.

Voy a hablar profesionalmente de las formas que he encontrado, en las que se puede salir adelante en Latinoamérica, para que no me pasen más los problemas asociados a tener malos clientes. Sin embargo, sé que este post va a ser un poco como la bomba que rompa prejuicios, y tal vez cambie paradigmas, ojalá.

Photo by Andrea Piacquadio from Pexels

Los problemas que he tenido en el pasado, han sido la burla del pago a 4, 6, 10 meses, 1 año hasta el nunca… básicamente todo lo demás tendría solución, pero el dinero… argh… Uno no trabaja por amor al arte, al menos no yo. El miedo a que no te paguen, no debería ser lo que rija tu profesionalismo, pero lamentablemente hay clientes, muchos, con los que uno se encuentra.

Yo no tengo en mis parámetros profesionales, aquello de que “el cliente siempre tiene la razón”, de hecho en mi área de trabajo, el cliente no solo NO tiene razón sino que de paso, no sabe lo que quiere. Así que, como yo si sé lo que quiero, se le explica amablemente todo, desde lo factible que es su proyecto en la realidad, con el tiempo dado por el mismo, hasta lo que vale hacerlo, cuántas correcciones puede hacer, una vez hecho, el mantenimiento y soporte también vale dinero. Al defender nuestra profesión y nuestra profesionalidad, entonces en nuestra cabeza comienza a sonar una canción, aprendida de compañeros de trabajo o dónde estudiamos, o en los foros, lo que tenemos es el trauma de que estamos en Latinoamérica, y que así siempre serán las cosas.

En el 2019 tuve 4 clientes, freelances, de los cuales solo 1 pagó a 4 meses. Y todo por haber cometido el error que ya es de novatos, y no me perdono más a mi mismo: no tener un contrato. En Latinoamérica no entiendo por qué, de paso, la competencia debe ser en base a quién da mejores trabajos a precios de regalo, no es que el mercado sea más barato, no es que haya más programadores aquí, que en Europa, Asia, o USA + Canadá. Así que mis precios son los mismos que de un programador en Estados Unidos o un Artista Técnico en Canadá. Nuestra autoestima de latinos nos juega muy en contra, eso sumado a que los clientes siempre piden rebajas o ñapas como si estuviésemos hablando de… no sé, ¿papas y tomates? La verdad, este ejemplo es el más repetido, pero ¿tu te imaginas a ese cliente que te acaba de decir que “¿por qué tan caro, que por ese precio esperaba recibir dos proyectos?”, entrando en un restaurante y decir que ahorita no tiene plata pero que la próxima vez que vuelva, va a comer el doble y si te va a pagar (un solo plato)?

Así que como ya me molestan esas excusas y quejas de los clientes, que no tienen ni idea de lo que están pidiendo, o peor aún los pocos que si saben lo que están pidiendo y piden más, aquí van mis requisitos, que aplico ahora mismo incluyendo si somos amigos, ya que si hay confianza, entonces más rápido se deben aplicar para mover un dedo en el siguiente trabajo.

Estos paradigmas y prejuicios mentales son como un límite de velocidad interno, que no nos permite avanzar, a la velocidad segura a la que podríamos ir y siendo programadores es lo peor que puede pasar.

Paradigmas

Paradigma de programador latino 1: El trabajo debe ser muy barato, o si no, no como – Soy latino, debo cobrar poco…
Mi trabajo tiene precio por horas, no te voy a decir que no hagas regalos, no voy a decir que no hay personas que merecen el trabajo gratis o tarifas especiales, pero no todos cumplen con estas condiciones de cariño, aprecio y respeto. Mis horas se cobran en dólares en el mismo precio que se cobra en USA, o sacado de la misma manera. Siempre habrán los clientes que te quieren emocionar: “este cohete que vamos a lanzar, ¡estará por siempre en tu portafolio!”, y entonces solo quieren pagar el 10%, o el 1% de lo que vale el proyecto. Tal vez para un programador sin experiencia, esto suene excelente. Tal vez quieras sumar meses a tu experiencia, para entrar en la empresa de tus sueños que piden trabajadores jóvenes con 3, 4, o 5 años de experiencia. Pero a la ventésima vez que lances el mismo cohete o parecido, esto es un timo gigante, y mientras más experiencia más caro deberías cobrar. El freelancer latino se tiene que dar a respetar. Páginas como upwork, freelancer, fiverr, están llenos de programadores de la India y otros países parecidos que cobran 1$ y máximo 5$ por hora, y de ahí todo los clientes quieren sacarnos los ojos. ¿Pero entonces por qué no hacen sus trabajos con esos que cobran tan barato y te quieren a ti? Autoestima, señores, la calidad, el profesionalismo valen. Otro problema es que entre nosotros mismos nos pegamos. Las empresas en un momento dado, empezaron a contratar jóvenes universitarios, que no pagan luz, comida, transporte por ellos mismos, y que cobran a precios de risa. Lo mismo de arriba. Pero entonces empezó a pasar lo que debía pasar. Con el tiempo, las empresas y estudios, se dieron cuenta que esos jóvenes no tenían como prioridad ese trabajo, o que ni siquiera tenían realmente la capacidad para hacerlos. Entonces vuelven contigo, que ya tienes varios cohetes lanzados y volando sin contratiempos, pero cuando das tu precio, te dicen, pero si Tal en la “Universidad Repopis” me cobran un cuarto de esa cantidad. La pregunta debe ser la misma. ¿Por qué crees que quieren TU trabajo y no al otro? Si tu trabajo es bueno, volverán, no te estreses, el estrés es de ellos.

Paradigma de programador latino 2: Tengo que aceptar la forma de pago del cliente o si no, no tengo trabajo.
En esta vida lo único que hay que aceptar es que nos vamos a morir en algún momento, y los atracos a mano armada… pero tu, profesional, que sabes hacer exactamente lo que quiere el cliente, no tienes que aceptar nada, las condiciones deben ser iguales para ambos lados. El cliente debe poder recibir su proyecto en tanto tiempo, y así mismo tu, tu dinero o los beneficios que hayan acordado. Así que en internet hay cantidad de plantillas de Contratos, Acuerdos de Confidencialidad, y otros, para Microsoft Word, Google Docs, o cualquier otro procesador de palabras que uses. En el contrato debes poner tus requerimientos, ¿no conoces al cliente? 50% por adelantado o nada. El desarrollo debe estar en tus manos todo el tiempo, y si el cliente va a ver un demo, beta, o ya final, ponle marca de agua por todos lados con tu nombre, o el nombre de tu empresa. Que lo quieren ver, sin la marca de agua para el socio japones-alemán? Entonces que paguen el 50% que falta. Nunca entregues nada definitivo, en el mundo de los videojuegos esto es más fácil que para los que hacen páginas web. A los programadores de páginas web, mi recomendación a parte de la del dinero, es que nunca hagan el proyecto en el servidor del cliente. Que paguen y tu lo subes. Y siempre, que no se les olvide, siempre firmar contrato, sea quién sea el cliente.

Paradigma de programador latino 3: Hay tantos programadores que debo bajar mis tarifas dando con la misma calidad.
Hay más programadores en Estados Unidos, que en cualquiera de nuestros países, tanto así que si sumamos toda LATAM, todavía los números son parejos y ellos no bajan sus tarifas, ¿por qué tu si?. Por otro lado, hay tantos proyectos iniciando en el mundo, que todavía hacen falta más programadores. No te pongas límites, barreras ni mucho menos te menosprecies. Yo no voy a defender a los programadores de la India, de los cuales muchos se burlan en vídeos de YouTube. Tengo que defender mi región y detesto cuando escucho hablar entre nosotros y decir es que mi trabajo debe ser más barato, para ganar el proyecto de UK. El mercado se mueve, y si tu trabajas bien, tienes un buen portafolio, puedes cobrar lo que vale. Tu puedes conseguir ese trabajo, con la misma tarifa de un freelancer de otro país. Al contrario, en los demás países suben el precio para demostrar que son los mejores, ¿quiénes somos nosotros para hacer lo contrario?

Paradigma de programador latino 4: De los mismos creadores de los puntos anteriores, nos llega, es que soy Latino, no tengo la misma calidad de otros.
La verdad es que a veces, somos hasta mejores, de tanto trabajar con las uñas, y no con el último equipo que fácilmente se puede pagar un freelancer en países del primer mundo. La programación de videojuegos se trata de resolver práctica, óptima y eficazmente una serie de problemas que muchas veces otros programadores, por rápidez del equipo, no ven. Y nosotros con nuestro i7 de 3era generación y apenas 8gb RAM, y una GeForce 870m vemos de inmediato. Y nos acostumbramos a corregir de manera más práctica que en otros lados. La mayoría de empresas están viendo a los latinos, porque cobran barato y superan muchas veces a los programadores de sus propios países. Insisto, hay que tener más autoestima y ética para respetarnos y exigir el precio que merece nuestro trabajo.

Tips

Siempre ten un contrato, firmado por ambas partes, con condiciones equitativas para los dos lados.

Un buen cliente no va a tener problemas contigo y tu pago, si el trabajo lo haces en el tiempo estipulado y tiene calidad AAA al menos. Nunca va a poner peros a un adelanto. Si el cliente comienza a pedir bajas, regalos, ñapas… mejor que lo hagan en la “Universidad Fresaria”

Cobra lo que vale tu trabajo, yo lo hago, tu también puedes.

Trabajo entregado solo previo depósito de dinero en la cuenta. ¿De qué te sirve decir, eso lo hice yo, si no te pagaron? No se admiten lazos de cariño con alguien que es solo un cliente. Siempre habrá quién merezca un trabajo tuyo gratis, pero si no se lo merece, no lo hagas gratis (o con precio no competitivo, no te regales) Mi abuelo tenía una frase de burla para eso: ¡No me pagaron, pero lo cobré bien caro! No seas más el bobo.

Si el cliente no quiere pagar adelanto, significa que no quiere gastar lo que vale ese proyecto, ni tu tiempo. Ojo con esos clientes.

Con tu mejor sonrisa, si el cliente no te convence, se vale decir: no, gracias.

La meta es ser profesional, sin llegar al punto de mendigar un trabajo, que de paso el cliente luego de darte sus migajas, siempre te va a sacar en cara que te dieron trabajo, como si fuese un favor. Ten dignidad, ética y moral profesional. Si no pagan las horas o lo que creas que vale tu trabajo, ese cliente no vale, déjalo ir, hay mejores, ¡te lo prometo!

Si el cliente te gustaba pero no te quiere pagar, déjalo ir tranquilo y con una sonrisa. Volverá. Si no el, uno mejor. Lo digo por experiencia, no por hablar de metafísica…

El precio del proyecto debería ser lo que gastas en servicios, comida, transporte, para realizar ese proyecto, sumado a un % de ganancias por tu trabajo. Así mismo cobro yo mi trabajo, si tengo el trauma de que no a todos los clientes les puedo cobrar lo mismo, que sea tu % de ganancias el que baje, pero nunca regales los servicios gastados, comida y transporte. Si el trabajo no te paga el taxi para llegar más rápido y sin estar sudando a la oficina del cliente, o donde se vayan a reunir, no vale la pena. Por supuesto, esto después de aceptado y firmado el contrato con el 50% en tu cuenta bancaria.

Cuando tu competencia, se dé cuenta que tu cobras eso, va a bajar sus precios al mínimo, casi que de regalo, y cuando se dén cuenta que eso no los ayuda a surgir, verás como comienza una competencia justa de libre mercado dónde lo que vale es la calidad, el profesionalismo y la certeza de quién lanza el mejor cohete, más rápido y más eficiente. Se vale bajar, 10, 50, hasta 100 dólares, pero no el 90%, eso no sirve ni para sobrevivir.

Aunque ninguna de las dos son aconsejables, vale más no tener dinero por no tener trabajo, y andar buscando, que haber hecho un mega proyecto, que el cliente pague una minucia o ni siquiera pague y tener la rabia de no tener dinero porque te deben y tal vez hasta, nunca vayan a pagar.


Esto es todo lo que les quería decir por el momento sobre este tema. Quiero con esta serie de escritos subir la autoestima latina del trabajo. No nos falta calidad, no nos falta cantidad, es algo de mentalidad, y tenemos que usarla para surgir, para demostrar todo el potencial que tenemos atrapado. No es difícil, pero es falta de confianza, y de costumbre, no nos tratamos como merecemos, esperamos que los demás nos traten bien, y no nos tratamos bien nosotros mismos. Pareciera metafísica y hablar estilo new age, la fuerza interna y tal… pero es algo práctico que puedes aplicar en este momento para lograr tener clientes que valgan la pena. Sé bien que no todos son iguales, pero hay que saber cómo buscarlos, cómo tenerlos y tratarlos. No estoy diciendo que los trates a las patadas, al contrario, que nunca quede por ti, el que un proyecto haya salido mal, pero tampoco que te queden mal a ti, el proyecto no va primero que tu, ¡nunca!

El próximo post ya será de programación de videojuegos, solo tenía que quería decir estas ideas, porque siento que a nosotros nos hace falta que nos hablen así. Si quieres que Latinoamérica surja, que se muestren todos nuestros colores, voces, e ideas, tienes que comenzar por ti, date a respetar, tu trabajo, lo que sabes, vale. La verdad esto sería para cualquier área, pero al menos tu, programador de videojuegos, que paguen lo que vales.


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